Desde Santa Amalia nos dirigiremos hasta Medellín, fundada por los romanos a orillas del río Guadiana, tal vez por Quinto Cecilio Metello en el año 80 a. de C. y donde nació, a finales del siglo XV, el conquistador de Méjico Hernán Cortés, cuyo monumento lo encontraremos en su abierta y bien cuidada Plaza Principal junto al edificio del Ayuntamiento.

Medellín conserva aún restos de teatro romano a las faldas de su majestuoso Castillo de origen árabe, que domina toda la zona y desde el cual se divisa tanto el río Guadiana como a su importante puente edificado en el siglo XVIII.

Muy cercana está la Iglesia de San Martín, en ruinas y la de Santiago, magnífica construcción del siglo XIII. En el interior de la población encontraremos la Iglesia Parroquial de Santa Cecilia de estilo renacentista, aunque inconclusa, fechada a mediados del siglo XVI. Hacia la localidad de Guareña pasaremos por la localidad Mengabril, donde contemplar su Iglesia Parroquial de Santa Margarita, del siglo XVI en estilo gótico y construido en sillería, muy cercana, al igual que la población, al río Ortiga.

Nos apartamos muy pocos kilómetros de la carretera que nos llevará hasta Guareña, para visitar a la carretera, para visitar a la ribereña con el río Guadiana Valdetorres, dedicada a la agricultura de regadío entre bellos parajes y zonas propias para la pesca. Su principal edificio histórico artístico es la Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción, construida en el siglo XVI.

En las cercanías de Guareña, famosa por sus buenos ríos y aceites, han aparecido numerosos vestigios que hablan de un interesante poblamiento de la zona en época romana y siglos posteriores.

Entre los edificios de interés que podemos conocer en esta laboriosa población destaca su Ayuntamiento, magnífico y raro ejemplo extremeño de edificio civil en estilo neoclásico, situado en plena Plaza Principal de la localidad.

A poca distancia encontraremos Iglesia Parroquial de Santa María, tal vez unos de los edificios religiosos más amplios de Extremadura, datado a mediados del siglo XVI y edificado a instancia del Obispo placentino Vargas de Carvajal con el asesoramiento técnico del afamado Gil de Ontañón .

Muy cercano se encuentran la localidades de Manchitay Cristina; la primera con su Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción reconstruida en el siglo XV y en Cristina, ya en la ruta hacia la Oliva de Mérida, podemos contemplar la Iglesia Parroquial de Santa Cristina, patrona de la población. En la cercana Oliva de Mérida, su bella serranía de Peñas Blancas es refugio de multitud de rapaces y dispone de pinturas rupestres esquemáticas, habiéndose descubierto también en las afueras de la población los restos de un poblado preromano. De los edificios romanos de su caserío destaca la Iglesia Parroquial de la Purísima Concepción del siglo XVI.

Desde la Oliva de Mérida y a unos 14 kilómetros llegamos a La Zarza, de gran fama por sus artesanos peleteros y sus buenos reposteros, en cuya cercana Sierra de la Calderita se hallan las célebres pinturas rupestres de su mismo nombre.

Esta, localidad cercana al río Guadiana, tiene dentro de su población en dos edificios religiosos de importancia: la Iglesia Parroquial de San Martín realizada en mampostería en el siglo XVI y la Ermita de Ntra. Sra. de las Nieves, magnífico ejemplo de construcción barroca del siglo XVIII.

Volvemos a la nacional 432 hasta la vecina Villagonzalo, localidad de origen medieval tras la Reconquista y ribereña también con el río Guadiana que posee, dentro de su caserío, la Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. de la Concepción, del siglo XVI y acabada en el siglo XVIII. A escasemente 10 km. y después de haber atravesado el "Badén" del río Guadiana llegaremos a Valverde de Mérida, rodeada de encinares y olivares y donde se divisa la majestuosidad de su Templo Parroquial de Santa Marina, construido en mampostería con una bella torre y portadas clasicistas con elementos platerescos.

Antes de continuar nuestro recorrido hasta San Pedro de Mérida, nos acercamos hasta la población de Don Álvaro, de origen medieval y situada en plena ribera del río Guadiana entre bellos paisajes fluviales, que dispone en su caserío de la Iglesia Parroquial de Santa Magdalena del siglo XV.

De vuelta a Valverde de Mérida tomaremos la carretera que nos une con San Pedro Mérida, en plena autovía N-V, pudiéndonos acercar antes a la localidad de Torrefresnada, población nacida al igual que otras de nuestro recorrido como localidad de colonización para terrenos de regadío.

En San Pedro de Mérida, situado en el término del Parque de Cornalvo, nos encontramos con una de las pocas edificaciones religiosas de claras influencias del arte hispanovisigodo, nos referimos a su Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol del siglo XV.

A pocos kilómetros se encuentra Trujillanos, fundada en el siglo XIV, y rodeada de grandes encinares destacando dentro de su población la Iglesia Parroquial de la Santísima Trinidad del siglo XVI.

En Trujillanos está ubicado el Centro de Interpretación de Agua y el Parque Natural de Cornalvo.

En Mirandilla, también en el espacio natural de Cornalvo, se pueden contemplar algunos edificios religiosos interesantes, caso de su Iglesia Parroquial de Santa María Magdalena del siglo XVI y, de ese mismo siglo , la Ermita de San Roque y la Casa del Marqués de la Encomienda.

Desde Trujillanos, desviándonos en la N-V, accedemos al Parque Natural de Cornalvo y Sierra Bermeja, excepcional paraje natural extremeño de más de 10.000 hectáreas, hábitat de numerosas especies y una rica flora, donde aún se pueden contemplar una magnífica edificación hidráulica de época romana, su presa desde la cual se abastecía de agua a la vecina Emérita Augusta.

El Parque dispone de itinerarios marcados para conocimiento del mismo y que llevan al visitante por los lugares de más interés de la zona, en cuyo centro se encuentra situado el Embalse de Cornalvo, que almacena las aguas para los pueblos vecinos, como ya lo hiciera en época romana.